La prevención de accidentes de tráfico es una de las prioridades dentro de la planificación de las empresas del sector del transporte por carretera. En la respuesta a la pregunta sobre cómo pueden las empresas minimizar los riesgos de accidente, se encuentran involucrados muchos factores, tanto técnicos como humanos. Con la planificación de la formación continua a conductores, jugando un papel fundamental en la consecución de los objetivos de reducción de accidentes.
El estilo de conducción es un factor determinante en la prevención de accidentes, que depende no solo de la capacidad para controlar el vehículo en diferentes situaciones, sino también de cultivar actitudes y hábitos solidarios con el resto de conductores y usuarios de la vía pública en general.
Vamos a ver a continuación que es la conducción segura y cómo pueden las empresas de transporte por carretera, reducir accidentes a la vez que ven mejorada su productividad.
Un estilo de conducción seguro, es aquel en el cual se minimizan las posibilidades tanto de causar como de sufrir accidentes y se compone de cuatro pilares fundamentales:
El conductor del vehículo es por tanto, la pieza clave en el desarrollo de una una actividad de transporte por carretera con menor riesgo de accidente. Podríamos definir un conductor seguro, como aquel que desarrolla una conducción segura y que adicionalmente, cuida de ambos su salud psicofísica y el estado del vehículo en el desarrollo de su actividad profesional.
Al fin y al cabo, el proceso de conducción está profundamente influido por factores como la personalidad, estado emocional y las actitudes del conductor. Por lo tanto y adicionalmente a la necesidad de asegurar que nuestros conductores están suficientemente descansados, es importante ayudarles a mejorar en la gestión de elementos estresantes que puedan afectarles durante el ejercicio de su actividad. En este punto, la formación adaptada a las necesidades de cada conductor va a ser muy importante.
El estado de los camiones, es también un factor crítico en la mejora de la seguridad y la disminución de accidentes, de gran impacto en los costes de operación. El mantenimiento preventivo dentro una flota de transporte de mercancías, es la herramienta que permite a las empresas controlar las diferentes necesidades de mantenimiento, como por ejemplo, revisiones periódicas de los neumáticos, frenos y luces, todas de gran importancia en la protección de conductores y carga.
El uso de soluciones inteligentes para la gestión de flotas, permite a las empresas definir las necesidades de formación para los conductores. Gracias al análisis de indicadores clave como el aumento del consumo de combustible, debido al comportamiento en carretera de los conductores. El diseño de programas de formación específicos para los conductores, permite a las empresas no solo reducir el número de accidentes, sino también lograr un uso más eficiente del combustible y la posibilidad de ahorro en las primas de los seguros de los vehículos.
Las soluciones de MICHELIN Connected Fleet permiten a las empresas obtener toda la información que necesitan para mejorar los estilos de conducción en la flota, si deseas obtener más información sobre cómo podemos ayudarte, o incluso solicitar una demo, no dudes en contactarnos completando el siguiente formulario.