Al igual que el sector del transporte y la logística se enfrenta continuamente a nuevos retos, también surgen nuevas soluciones a estos problemas y nuevos términos para referirnos a ellos. El sector de la gestión de flotas en su conjunto, sin ir más lejos, se encuentra inmerso en una batalla por reducir sus emisiones de CO2. De ahí que se haya empezado a utilizar flotas compuestas únicamente por vehículos eléctricos, lo que se conoce como "electrificación de flotas".

Un término con el que quizá no estés del todo familiarizado es el referente a la movilidad para flotas, comúnmente denominada movilidad de flotas o gestión de la movilidad. 

Normalmente, cuando hablamos de soluciones para la gestión de flotas, nos centramos en los vehículos que las componen y, evidentemente, en el ciclo de vida de cada uno de ellos, es decir, en cómo mantenerlos en funcionamiento de forma segura y rentable.

Sin embargo, la movilidad para flotas añade una nueva perspectiva de la gestión, al tiempo que mantiene la aplicación de los principios fundamentales de la misma. Hemos creado este artículo para que puedas familiarizarte con el concepto de la movilidad para flotas, el cual incluye todo lo que necesitas saber, incluido cómo podría beneficiar a las operaciones de tu flota sin importar su tamaño.

¿Qué es la movilidad para flotas?

Como hemos mencionado, en lugar de referirse a los vehículos que componen una flota, la movilidad para flotas se refiere más bien a los empleados de una organización. En particular, a la forma en que estos miembros del equipo se desplazan mientras realizan su trabajo por motivos empresariales. Su objetivo es por tanto sumar a la estrategia de gestión de la flota, desarrollando acciones relacionadas con la movilidad, que mejoren la eficiencia general y reduzcan los costes asociados a dicha movilidad.

Al fin y al cabo, si nuestros empleados tienen que desplazarse para trabajar, existen oportunidades inherentes de mejorar ineficiencias. Ineficiencias que suponen tiempo y recursos monetarios. Regulando el comportamiento de los trabajadores en movilidad podemos por tanto reducir ineficiencias e incrementar la productividad.

Como la mayoría de los aspectos relativos a la gestión de flotas moderna, la base de la información clave sobre movilidad la encontramos en los macrodatos, es decir, la información sobre la ubicación, el tiempo y el trabajo. A partir de estos datos, los gestores pueden discernir las opciones de desplazamiento más eficientes y económicas, con el objetivo de mejorar la productividad. Pero para ello es necesario responder a una serie de cuestiones, como: "Con qué frecuencia viaja un empleado concreto, cuánto le cuesta llegar a su destino, qué medio de transporte utiliza y si existen opciones mejores".

¿Qué medios de transporte hay disponibles?

Cuando se habla de viajes rentables, la gente tiende a inclinarse por el metro y el autobús. Este contexto podría sugerir que la movilidad para flotas significa deshacerse de todos los coches de empresa, para que sus empleados puedan ir de A a Z a un coste menor. Aunque hay algo de verdad en esta perspectiva, entendemos que no es del todo viable, o incluso aconsejable, para muchas empresas. 

Ante todo, la movilidad de las flotas consiste en evaluar exhaustivamente las alternativas con el fin de determinar el enfoque más adecuado para una situación determinada. Por supuesto, la forma correcta de actuar variará considerablemente de una organización a otra, pero un punto de partida es conocer todos los medios de transporte accesibles.

Podría darse el caso de que los coches de empresa se adapten bastante bien a la metodología de ésta, dado que generalmente representan la forma más rápida de desplazarse. Además, si el coche de empresa es eléctrico, también es deseable desde el punto de vista fiscal y medioambiental. No obstante, siempre hay alternativas a considerar y por ejemplo, a algunos trabajadores se les podría quizás ofrecer el mismo nivel de flexibilidad, simplemente utilizando sus vehículos personales con la ayuda de un subsidio de viaje. Otras alternativas a considerar pueden ser,  contratar un Uber o similar, contratando un alquiler a corto plazo, viajando en un coche compartido o incluso recurriendo al transporte público más básico. La clave reside en disponer de alternativas planificadas, que podamos escoger cuando su uso sea más eficiente. No hablamos de sustituir a los vehículos de empresa, sino de integrar modos alternativos en las funciones de transporte existentes en la empresa para hacerlas más ágiles.

Ventajas de la gestión de la movilidad de la flota

La inclusión de una estrategia de movilidad de flotas dentro de las operaciones cotidianas de una empresa, resulta atractiva para los gestores de flotas porque conlleva una serie de grandes ventajas. Es posible extrapolar de manera sencilla las ganancias intrínsecas, si utilizamos el Coste Total de Propiedad (TCO) y lo comparamos con el Coste Total de Movilidad (TCM) de una flota. 

Es decir, al igual que el TCO ha demostrado ser una medida singularmente eficaz para los gestores, el TCM permite a dichos gestores conocer el coste real de los desplazamientos de los trabajadores, y calcular presupuestos de viajes mucho más exactos. Realizando evaluaciones asociadas al coste total de la movilidad ahorramos tiempo y dinero gracias a un grado de control sin precedentes, combinando diferentes medios de transporte de manera eficiente y reduciendo el uso del coche de empresa.

Soluciones de movilidad para flotas

El análisis de la movilidad en flotas tiene un impacto directo en los costes de la empresa, no obstante algunos gestores podrían percibir su análisis como una tarea muy complicada o que requiere de muchos recursos por su parte. No obstante, ahora existen soluciones inteligentes para flotas, diseñadas específicamente para que gestores y propietarios puedan centrarse en lo que de verdad importa, generar una ventaja competitiva sostenible.

Estas soluciones permiten realizar un seguimiento y gestionar el uso del transporte por parte de los empleados. Revelándose oportunidades para lograr nuevas eficiencias dentro de las estructuras de viajes corporativos, mediante paneles de control muy sencillos, que muestran la información precisa para la toma de decisiones en este ámbito en concreto.

En resumen, la movilidad para flotas ayuda a las empresas en dos áreas vitales, el coste y la eficiencia, lo que le permite atender las necesidades de una empresa, con mayor eficacia y de una manera más sostenible.